ORDENES MILITARES Y FRAILEROS QUE FUERON CABALLEROS

Las órdenes militares fueron sociedades monásticas de caballeros, originadas en la Edad Media, que combinaban la vida religiosa con la actividad militar, principalmente en la lucha contra el mundo musulmán y contra herejías cristianas. Las más famosas incluyen a los Caballeros Templarios y Hospitalarios, y en la Península Ibérica, a las órdenes de Santiago, Calatrava, Alcántara y Montesa, que tuvieron un importante papel político, social y económico en la época.

Traemos esta entrada por ser David Garrido caballero de la Orden de Isabel la Católica y alcalde carismático de la localidad.

ORDEN CIVIL DE ISABEL LA CATÓLICA (1851-1907)

Fernando VII creó el 24 de marzo de 1815 la Orden de Isabel la Católica para premiar los méritos contraídos por españoles y extranjeros en la defensa y conservación de los dominios españoles en América. Estableció como patrona de la Orden a Santa Isabel de Portugal. Esta Orden era compatible con el resto de las Órdenes españolas.

A su frente, como Gran Maestre, figuraba el propio rey. Contaba con un Consejo integrado por un Canciller Presidente (el arzobispo de Toledo). Sus expedientes los instruía el Ministerio de Estado a propuesta del Departamento del que dependía el agraciado. El interesado enviaba un memorial (a veces acompañado de documentos acreditativos) al rey por medio del secretario de Estado, solicitando que se le concediese alguna condecoración de la Orden. El secretario de Estado lo remitía de Real Orden a la Asamblea para que consultara, y ésta a su vez lo remitía al fiscal para que emitiera su dictamen. Recibido éste, la Asamblea redactaba una consulta con su parecer para que el rey resolviera.

Si el rey decidía conceder la gracia, expedía un Real Decreto de concesión que se dirigía al Secretario de la Orden. Éste lo comunicaba mediante oficios a las oficinas de la Orden y al interesado. Una vez que éste había pagado los derechos correspondientes se le expedía el título. A veces solicitaba la exención del pago, que era concedida o no. Si el agraciado era extranjero, se enviaba el título al secretario de Estado para que se lo remitiera. El título concedido podía ser el de Gran Cruz, Comendador o Caballero.

DAVID GARRIDO SERRANO, ALCALDE DE FRAILES (1840- 1892)

David Garrido y su esposa.

En 1843 se inicia el reinado de Isabel II, con una década de gobiernos moderados, hasta 1854 que tiene lugar el bienio progresista. En 1868 da comienzo ese año el llamado Sexenio Revolucionario 1868-1874. Y es precisamente ese año cuando llega al Ayuntamiento frailero David Garrido Serrano, año revolucionario, en el que una vez que hubo triunfado la rebelión se formó un gobierno provisional, en el que el general Serrano representaba a los progresistas unionistas y Prim a los demócratas. Con 28 años David Garrido es nombrado síndico y vocal de las comisiones de Propios, Pósito, Ornato e Instrucción Pública, en el mes de octubre y en noviembre Regidor Interventor de Fondos Municipales.

Nacido en Frailes1 el 16 de diciembre de 1840. Hijo de Julián Garrido y María Balbina Serrano. Se le impusieron los nombres de David, Antonio, José de san Valentín. En 1863 David se casa con la también frailera Amadora Álvarez Jiménez.

Casa en la plaza Rector Mudarra que perteneció a David Garrido.

En Frailes, el reinado del rey saboyano coincide con la llegada a la alcaldía de David Garrido Serrano que tras las elecciones de1871 es reelegido concejal y en febrero del 72, y por unanimidad, es elegido alcalde; le acompañan en el gobierno municipal Ildefonso Gallardo Ibáñez, como primer teniente de alcalde y Domingo Castro, como segundo teniente alcalde; y como síndico procurador Justiniano Moya Garrido.

Es esta una etapa en la que los temas sanitarios toman gran relevancia, así el médico y la instalación de una botica serán los temas abordados en esta primera etapa del gobierno de tan señero alcalde. Las infraestructuras fueron tema prioritario. El 23 de mayo de 1870 se debate la necesidad que había de que se informase a las Cortes Constituyentes, el grave perjuicio que suponía para esta zona la alteración del proyecto de ferrocarril, que ya no pasaría por estos pueblos. El Ayuntamiento acuerda nombrar al alcalaíno Francisco Asís Romero para que gestione, en lo que pueda, que el ferrocarril parta de Mengíbar y, pasando por Jaén, cruce estos pueblos hasta empalmar con el de Granada en Pinos. La segunda de las infraestructuras que se tratan de construir para lograr el desarrollo de la Villa son los puentes, que jalonaban Frailes y que por ahora toman prioridad, pues se encontraban en un estado deplorable y se piensa en construirlos de piedra, debido a que la mayoría eran simples pontones de madera; este es el caso del «Puente de la Presilla».

También se pensó lo útil y necesario que sería para la Villa la creación de un puesto de la Guardia Civil. Se argumenta la seguridad de los concurrentes al Balneario; dice así: El Ayuntamiento conociendo lo útil y necesario que es en esta Villa la creación de un puesto de la Guardia Civil aunque sea con la fuerza menor posible, no solo para auxiliar la autoridad local, sino es también para la mayor garantía y seguridad de las personas que concurren a estos baños minerales y que generalmente son de elevada clase y casi todas de buena posición. Pero no termina aquí la tesis del gobierno municipal que continua de esta manera: … por otro lado la livertad que en las circunstancias actuales ha tomado la clase menos acomodada de la sociedad cuyos sujetos abundan en ésta, hacen el que se esté siempre en continua zozobra

Pero de ésta primera etapa de gobierno municipal de David Garrido llama la atención los vericuetos económicos para la compra de un reloj y la búsqueda de un lugar en el que los labriegos y artesanos pongan a la venta sus productos. El sitio elegido fue la Plaza de San Miguel, que más que plaza era un ensanchamiento en la calle, pero fue el lugar en el que a diario se compraban y vendían los artículos. Con respecto al reloj, se consideraba muy necesario pues la población iba en aumento, ya se contabilizaban unos 3.600 vecinos y era necesario un reloj que indicase las horas, pues son pocos los fraileros poseedores de tan preciado artilugio. Además regularía los riegos de las vegas, señalando el tiempo que cada uno podía hacer uso del agua. Y se construyó una torre en la casa Consistorial para colocarlo.

Plaza San Miguel hoy Rector Mudarra.

En enero de 1875, los dirigentes del Comité Alfonsino de la Villa de Frailes, se habían reunido en casa de su representante más destacado, David Garrido Serrano. Y tras leer las propuestas del Comité se dirigieron al Ayuntamiento a fin de tomar el poder, como verdaderos representantes de la nueva dinastía. Pertrechados con el retrato del joven rey Alfonso XII, y una vez en la Casa Consistorial, lo colocaron en la presidencia, y según cuenta el acta fue un clamor popular, unido al alarde de vivas lo que hizo que se nombrara una nueva Junta de Gobierno cuya cabeza sería el monárquico David Garrido y como secretario Gregorio Muñoz.

El nuevo Ayuntamiento queda conformado de la siguiente manera: alcalde, David Garrido Serrano; dos tenientes de alcalde: Manuel Peláez y Antonio Pareja Cuenca; y siete concejales: los Antonios Mudarra, Anguita y Martín, José Garrido, Francisco Peña, Vicente Romero y Justiniano Moya que sería el defensor del pueblo con el cargo de síndico.

Dos sucesos copan la importancia del año 1876, la finalización de la tercera guerra carlista y la proclamación de una nueva Constitución. Y el nombramiento de David Garrido como Caballero de la Real Orden de Isabel la Católica. Dice así el documento que acredita el nombramiento y que copiamos a la letra: Don Alfonso XII rey constitucional de España. Por cuanto queriendo dar una prueba de mí real aprecio a vos don David Garrido y Serrano; ha tenido a bien nombraros por mí Decreto de veinteseis de junio del corriente año, caballero de la Real Orden de Ysabel la Católica.

Título de caballero de la Orden de Isabel la católica a David Garrido

Por tanto os concedo los honores, distinciones y uso de las insignias que os corresponden al tenor de los Estatutos confiando por las cualidades que os distinguen y que os esmerareis en contribuir al mayor lustre de la Orden. Y de este título refrendado por el secretario de la Orden y firmado por el Gran Canciller, se tomará razón en la Contaduría de la misma.

Dada en Palacio a veinte de septiembre de mil ochocientos setenta y seis. Yo el Rey.

Yo don Felipe Mendez de Vigo, Ministro Secretario de esta Real Orden. Orden lo hice inscribir por su mandado.

En 1877 David Garrido es nombrado alcalde por unanimidad, y su elección se vio ensombrecida por una plaga de langosta que se vieron obligados a tomar medidas de carácter económico conducentes a paliar la difícil situación en que se encontraba la villa. Se trataba de un servicio a la comunidad obligatorio para todo el vecindario que variaba en función de la edad y de las posibilidades económicas de cada vecino; así los que tuviesen yunta debían dar cuatro jornales; y los varones de hasta 50 años un jornal. Los daños por tan terrible y bíblica plaga fueron cuantiosos, pues hasta los ganaderos presentan quejas ante lo intransitable de los caminos y veredas.

El año 1878 no empezó mal, al menos en el mundo del corazón; Alfonso XII se casaba con su prima María de las Mercedes de Orleáns y Borbón. El romance contó con la oposición de la reina Isabel II, quien cuentan entró en cólera al conocer que su primogénito quería contraer matrimonio con la hija de su hermana y de Montpensier que habían participado en la revolución de 1868. En Frailes fue designado el principal valedor del rey en la Villa, su alcalde David Garrido, y desde la Diputación Provincial se le envió a Madrid para asistir a la boda del monarca con su prima. Se puso sus mejores galas y causo sensación en la boda real aquel 23 de enero. Tanto él como su esposa se pusieron sus trajes antiguos y de esa guisa se plantaron en el palacio Real en donde, según crónicas antiguas, nos informan que causaron gran sensación.

Y así lo recoge la prensa de la época como La Correspondencia de España, de sábado 26 de enero de 1878, que en su edición de noche de 25 de enero, recoge en su artículo Comparsas de Provincias, dice: Desde las primeras horas de esta mañana, un gentío inmenso se fue estacionando en el Salón del Prado, delante de las tiendas de campaña ocupadas por las comparsas que han costeado las provincias. Entre los lugares que señala que han acudido al evento se habla de Zamora, Murcia, Valencia, Cáceres y Ciudad Real. Pero nos vamos a detener de lo que cuenta de la de Jaén: La de Jaén la componen parejas de aquella provincia que visten de la siguiente manera: las mujeres pañuelo de seda a la cabeza, peinado a la moda, vestido común y pañuelo de seda al talle; el de los hombres es chaqueta corta con botones de plata, chaleco de castor fino con botonadura también de plata, faja de seda negra bordada de colores, pantalón corto de punto de seda con botonadura plateada, botines de castor negro y zapato blanco.

Y continúa el periodista: Una de las parejas pasa 23 arrobas y 19 libras. Esta comparsa esta presidida por el alcalde de Frailes, D. David Garrido Serrano, y se distingue también por lo agradable y simpático de su acento, y por su carácter sencillo y Franco.

En 1879 hubo elecciones municipales y nuevamente se hacen cargo del poder los monárquicos y como alcalde su principal representante, David Garrido Serrano. En el mes de julio, y según consta en los Libros de Actas visitan Frailes dos personalidades de la época, debido a que conocían al alcalde David Garrido. Como siempre, las buenas comunicaciones, son una de las asignaturas pendientes con las que se encuentra Frailes, y Garrido sabía que un pueblo bien comunicado, haría más fácil el despegue económico que tanto se necesitaba. En este marco realizan su visita a la Villa Antonio de Gregorio y Joaquín Ruiz Jiménez. Ambos eran miembros destacados de la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Jaén.

La noticia llega hasta nosotros por lo que recoge El Industrial de lo ocurrido en Alcalá la Real en diciembre de 1887. En julio de 1889 en la causa criminal por lesiones que se seguía en Jaén contra los hermanos Valentín y David Garrido por los hechos ocurridos a don Domingo Banavides Santaolalla. Cuenta el periódico que tras servir una merienda en casa de don Cándido Escribano en Alcalá la Real, a la que asistieron los hermanos David y Valeriano Garrido Serrano junto con personalidades de la vida social alcalaína, a saber: José María Banavides, José Suárez Trujillo, que era teniente de alcalde, y Domingo Benavides Santaolalla. A la reunión se une más tarde D. Pedro Higueras y Sabater, juez del juzgado de primera instancia de Martos, que anteriormente había sido de Alcalá la Real. Este sospechaba que su traslado a Martos se debía a que David Garrido, con sus conocidos en el Parlamento Español, había hecho posible que Higueras fuese desplazado desde Alcalá a Martos. Así que los hermanos Garrido sacaron un puñal y una pistola y amenazaron a Higueras. Se salieron hasta otra estancia y David muy alterado por lo que se le imputaba, sacó un puñal y asestó un golpe a Domingo Benavides, estanquero en Alcalá.

El industrial, periódico donde se cuenta la historia de los hermanos Garrido.

Los hermanos Garrido fueron detenidos en la casa de D. José Retamero. Se enfrentaron a un juicio y fueron defendidos por D. Joaquín Ruiz Jiménez. La condena fue a 1 mes y 10 días de arresto, supresión de todo cargo y del derecho del sufragio durante el tiempo de la condena y a 100 pesetas de multa.

En enero de 1890 David Garrido volvió a la alcaldía, y los temas principales fueron el cementerio y el establecimiento de una feria anual los días 17 a 19 de septiembre de cada año. Pero la fatalidad hizo que el 10 de julio de 1892, según el telegrama oficial que envía el primer teniente de alcalde en el que participa que el alcalde D. David Garrido, por salvar a un niño de seis años que se hallaba próximo a perecer ahogado, en uno de los ríos que atraviesan aquella Villa, se arrojó al agua, logrando salvarle. Pero a consecuencia de su rasgo caritativo, se encuentra hoy tan grave que se teme le cueste la vida.

Tarde recogía la prensa la noticia, pues en acta de Ayuntamiento frailero se dice en sesión de 10 de julio de 1892: El profundo sentimiento que le ha producido tan prematura y repentina muerte por verse privado del importantísimo concrino? Del que con tanto celo, actividad, lealtad e inteligencia los ha venido constantemente dirigiendo en la marcha ordenada de la política y de la administración. Que se haga así saber y la viuda y familia del finado, dándole el más sentido pésame en nombre de la Corporación.

En el cementerio de Fraileas reposan sus restos junto a los de su esposa.

4 comentarios en “ORDENES MILITARES Y FRAILEROS QUE FUERON CABALLEROS

  1. Gracias por este relato tan interesante, con la coincidencia que sale el apellido Mudarra , mi abuela que era de Frailes se llamaba Hinojosa Mudarra

  2. Gracias por este relato tan interesante, con la coincidencia que sale el apellido Mudarra , mi abuela que era de Frailes se llamaba Hinojosa Mudarra

    1. Mi abuelo paterno se llamaba Agustín González Torrebejano, lo mismo somos parientes, pues mis apellidos de soltera son González Vela. Gómez es el apellido de mi marido, vivo en Suiza pero nací en Frailes de donde son todos mis antepasados! Un saludo

  3. Pues puede ser mi abuelo se llamaba Fernando Torrebejano Martín y también era de Frailes en los años 50 emigró a Barcelona
    Un saludo

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *